Un mes, hoy se cumple exactamente un mes desde mi llegada a tierras Aussies, muchas cosas han pasado desde el día que me perdieron la maletilla (maletilla por llamarlo de forma cariñosa porque…).
Esta semana al parecer es la semana de la “suerte” australiana, si trazamos una línea horizontal que pase por Brisbane y divida Australia en partes, y lo miráramos desde el cielo, veríamos la parte superior de color azul, llena de agua (bueno mejor de color marrón del lodo) y la otra mitad la veríamos roja y amarilla, y no porque esté aqui yo con mi bandera, sino porque la mitad sur se quema.
Y estaréis diciendo, vaya cosillas nos cuenta este chaval, en España sólo hace falta que llegue Mayo o Junio para ver a Bruno subido en el helicóptero corriendo de un lado a otro en busca del fuego, y esperas unos meses más para que el Levante Español se sumerja bajo las aguas. Estoy de acuerdo que en España también tenemos incendios e inundaciones pero este país es 16 veces más grande que España y aquí lo hacen todo a lo grande.
Empezaré por los incendios, aquí como todo sabéis es verano y se están pulverizando los record históricos de temperatura, por lo que un pequeño incendio se convierte rápidamente en algo bastante peligroso y más si alguno de los incendios es provocado como dicen los periódicos.
Lo divertido viene cuando el fuego alcanza una especie de árbol australiano, que mide como entre 10 y 30 metros, y cuya resina es como la gasolina, en cuanto se calienta se inflama y arde, y un árbol de 30 metros cargado de eso arde como un pozo petrolífero iraki. Probablemente os parecerá exagerado pero los periódicos hablan de llamas de 50 o 60 metros que se mueven a una velocidad que ronda los 100km/h, y de eso no se escapa ni en el helicóptero de la Junta de Castilla y León. Si al tema del combustible australiano, le sumas que el urbanismo aussie está pensado para el disfrute de la vida en el campo y que construyen una fila de casas y un bosque detrás, una fila de casas, un bosque, una fila, un bosque… pues te encuentras con que la bola de fuego de 50 metros que se mueve a 100 por hora mata a 200 personas en el estado de Victoria en una mañana sin despeinarse.
Lo que pasa es el norte, en el estado de Queensland no es mucho más agradable, allí todo esta cubierto por el agua, incluso el estado de Northern Territory y la capital del mismo Darwin están afectados. El pro
Para completar la lista de noticias felices, hoy en Sydney a escasos 300 metros de la opera de Sydney, unos buceadores del ejército (para más señas del Royal Australian navy’s Clearance Diving Team 1) realizaban unas maniobras sobre terrorismo en Sydney Harbour cuando han recibido una visitilla inesperada y uno de los buceadores ha sufrido el ataque de un tiburón y ha perdido una mano y parte de la pierna, no se sabe la especie del tiburón pero los señores expertos creen que es un tiburón toro.
Pero no todo son malas noticias, en un mes hemos tenido un montón de buenas noticias, va a empezar la liga de Rugby Super 14, un español nos hizo llorar con lo bien que juega al tenis, y no solo nos hizo llorar a los españoles que le animábamos desde Sydney, hemos abandonado la casa de los Gunnies para vivir en una residencia, hemos ido al cine IMAX más grande del mundo, hemos tocado un canguro, hemos visto un diablo de tasmania (y en España los llamamos de otra manera “perropatada”), hemos disfrutado del día de Australia, hemos hecho surf, hemos conocido a un montón de gente… pero lo mejor de todo no es lo que hemos hecho, sino lo que nos queda por hacer, pero eso para el siguiente capítulo.