10 mar 2009

Greenwich Village

Después de mi paso por la segunda vivienda de los Warner cerca de Cronulla Beach y de tener de compañero al futuro ganador de American Idol en mi cuarto y a una colonia de cucarachas gigantes en el salón, me trasladé a Greenwich Village, una residencia que esta en el distrito del mismo nombre y que alberga a unos 150 chicos y chicas de todo el mundo.
Para llegar a la residencia desde la escuela tengo que coger el tren y en 15 o 20 minutillos estoy en la resi, mucho mejor que la hora y pico que tardaba antes, además ahora al estar en el norte cruzo todos los días en tren el Sydney Harbour Bridge, lo cual está bastante bien.
Puedo elegir entre pararme en las paradas de Wollstonecraft o de St Leonards, la primera es pequeñita, está en medio de un bosque que es la entrada a la zona residencial donde se encuentra la residencia y está un pelin más cerca andando. La segunda por el contrario es bastante más grande y está rodeada de grandes edificios y tienes un centro comercial alrededor por si necesitas comprar algo, diríamos que es más urbana.
La residencia es un edificio de tres plantas con forma de L, el primer piso es sólo de chicas, el segundo sólo de chicos y el tercero es mixto.
En la planta baja, tras cruzar la piscina y los jardines se encuentra el salón que es la sala más grande, hay como 8 sofas de tres plazas y unas cuantas mesas donde la gente se baja con el portátil a conectarse (como yo ahora mismo), a ver la tele, a jugar a la Play o simplemente a charlar un ratillo. Si continuas por el pasillote encuentras con la sala de ordenadores y con la sala de juegos, que tiene más sofas, una mesa de ping-pong y una de billar. Por último antes de girar hacia el comedor está otra sala de televisión donde está la conexión a la tele por cable y donde vemos los partidos de la Liga, la Champions, la NBA, al Madrid perder... esas cosillas.
El edificio en la parte interior de la L, la parte que da al jardín está rodeado por un enorme balcón en cada uno de los tres pisos, allí la gente sale a hablar y a pasar el ratillo.
Lo bonito de vivir aquí es que puedes encontrar gente de todo el mundo, yo comparto habitación con Dag un noruego muy majete que estudia en mi escuela, y que estudio publicidad o algo parecido en Noruega.
Tenemos desde asiaticos de todas las variedades, a franceses, a un equipo de cricket inglés que lleva aquí miles de meses jugando un torneo (es lo que tiene que los partidos duren varios días), un grupo de escandinavas, americanos, sudamericanos de todos los tipos, holandesas, un islandés, otros tres o cuatro españoles,un neozelandes de origen coreano, alemanes..
La verdad es que me trae buenos recuerdos vivir, aquí aunque el tema es distinto al Europa, ya que aquí la gente va y viene y no está tanto tiempo aquí viviendo, pero hay muy buen rollo entre todo el mundo, de hecho solemos hacer bastantes cosas la matoría juntos, barbacoas, salir de fiesta, el otro día fuimos al Mardi Gras todos juntos....
Volviendo a la residencia otra vez, tenemos el desayuno de 6:30 a 8:00 y la cena de 18:30 a 19:30, ya sabeis horario australiano, hay gente que se queja de la comida, pero vamos que yo después de unos añitos en el Europa, y unas semanas en casa de los Warner estoy encantado, hay como 5 o 6 cosas para elegir, y puedes coger o las 6 o las que quieras y te lo ponen todo en el mismo plato, así que te acabas llevando un "plato-montaña" bastante majo, además tenemos ensaladas y los postres estás bastante aceptables.
No se que más contaros de la residencia, que hay una lavandería con unas cuantas lavadoras y secadoras enormes donde hago la colada, si he dicho hago, porque de momento no he tenido que contratar a nadie para que la haga, también hay unas 4 planchas en cada piso con su respectiva tabla pero esa es una técnica en la que todavía no me he adentrado.
También tenemos una especie de cocina en cada piso, donde hay microondas, tostadora y otras cosillas para que cada uno se prepare lo que le parezca oportuno.
Ahora mismo estoy en el salón con el portátil, hay un coreano y un francés jugando al Pro en la Playstation, hay una holandesa viendo fotos con el islandes en un ordenador, unos asiaticos en una mesa y unos sudamericanos en otra, y hay gente fuera fumando, porque esta prohibidísimo fumar en el interior (cosa que me encanta), incluso en las habitaciones, no como en el Europa que todo el mundo se lo pasaba por... .
Pues poquillo más, que no está nada mal vivir aquí y que para los próximos capítulos dejaremos, el Mardi Gras (la fiesta Gay más grande del mundo), mi cumpleaños, y los planes de los viajes que tenemos planeados, curso de bucéo en Queensland en la gran barrera de coral, y viaje en furgoneta por la costa sur hasta Melbourne a ver como Hamilton deja los dientes contra la barrera del Albert Park Circuit.

Sydney

Hola que tal
Hace como un mes que no escribo nada, lo que si lo pensáis bien quiere decir que estoy superentretenido a la par que muy ocupado con mi inglés y mis cosillas, pero como los incondicionales del blog me han hecho llegar sus ansias de nuevas noticias desde el otro lado del mundo, pues aquí estoy de nuevo.
En los primeros capítulos de este blog hablé de la cultura australiana, pero creo que ahora toca hablar de la ciudad que me acoge, Sydney. Con ocho millones de habitantes es la ciudad más poblada de Australia y su población casi alcanza la mitad de la población total del país (20 millones de habitantes).
Sydney fue el primer asentamiento inglés en Australia, aquí llegaron los primeros convictos ingleses que posteriormente serían los primeros habitantes Australianos allá por 1877. De aquel asentamiento quedan las antiguas casas, que hoy forman el distrito de The Rocks, algo así como el casco viejo de una ciudad europea pero con varios siglos menos de historia.
La ciudad se sitúa en la costa sudeste del país, sobre la bahía que comparte su mismo nombre. La imposibilidad e expandir la ciudad hacia el Este y el modelo urbanístico australiano (como mola decir esto con la que está cayendo en España) todo son casitas unifamiliares o bloques pequeños, hacen que la ciudad tenga una extensión enorme hacia el Norte, el Sur y el Oeste. Es difícil de calcular pero podrías conducir en torno a una hora hacia el norte y seguir sin salir de Sydney.
Pero dejemos la historia para otro día y vayamos con las cosas interesantes, la ciudad gira en torno a lo que aquí se denomina la city o CBD (central business district), donde se encuentra los centros de negocios más importantes de Australia, el mencionado CBD se extiende al sur del Sydney Harbour Bridge, famoso puente del que hablaremos más tarde, hasta la estación de Central Station.
En el CBD justo frente a la estación de Town Hall podemos encontrar el edifico más antiguo de Sydney, el Queen Victoria Building y que ahora mismo es un centro comercial, además de ese en el distrito de negocios se encuentran algunos de los edificios más emblemáticos de Sydney, como la Sydney Tower el más alto de todos ,en cuya cima podemos encontrar un restaurante que gira a 260 metros del suelo y desde el cual se puede prácticamente todo Sydney.Mi escuela está en pleno CBD, justo debajo de el AMP plaza y de un edificio que cuando llegue aquí me sonaba de algo, pero que tarde unos tres días en identificar, se trata del Governor Philip Building, que sale en Misión Imposible II, para los no hincados es esto del cine, Mision Imposible II es la segunda película de una saga perpetrada por Tom Cruise, que fue rodada en Sydney y que para los críticos será recordada como aquella película en la que las ruedas de las motos se cambiaban automáticamente en plena persecución dependiendo del terreno, lamentable. En dicha aberración de película el protagonista, Ethan Hunt, interpretado por el profeta de la cienciología, entra por el tejado con una serie de acrobacias para robar el Velerofonte, el antidoto a un extraño virus llamado Quimera, como ya he dicho lamentable.
Pues eso que yo voy a clase justo debajo del mencionado edificio a 1 minuto andando de la estación de Circular Quay, que además de ser estación de tren e intercambiador de autobuses, es el principal puerto del que salen todos los ferries de la ciudad.Los monumentos más emblemáticos de la ciudad sin ninguna duda, son Opera House y el Sydney Harbour Bridge, probablemente si a alguien le enseñas una postal de alguno de los dos rápidamente la asociará con Sydney lo que nos da una idea, de la dimensión mundial de ambas construcciones.
La Opera es según los expertos el edificio con mejor acústica del mundo, os lo diré cuando vaya a ver alguna representación allí, y el puente, construido hace cerca de 90 años, por el que pasan 8 carriles de carretera y la línea de tren en ambos sentidos, y probablemente lo asociareis al vestido de nochevieja y al cotillón porque mientras os preparáis para tan magno y repetitivo evento todos los años, en las noticias aparece el puente desde donde se lanzan los fuegos artificiales que dan la bienvenida al año antes que en cualquier parte del mundo. Para que os hagáis una idea el gobierno australiano se deja 4 millones de dólares australianos en decorar el puente y en los fuegos artificiales cada año, así que os podéis hacer una idea de cómo son, más o menos como los que ponen en San Pedro.
Otras zona importante de esta ciudad, es el Jardín Botánico, donde de día puedes encontrar miles de murciélagos durmiendo colgados de los árboles como si fueran frutas, y que cuando por la noche despiertan tienen medio metro de envergadura y que hacen un ruido bastante desagradable. Es algo así como el Central Park de New York salvando las distancias claro.
Un poco más lejos cogiendo el ferry, puedes llegar a las famosas playas de Manly y Bondi, y las más pequeñas pero más acogedoras y aptas para hacer barbacoas de Cugee ,Shelley, Tamarama o Bronte.
Lo bonito de Sydney es que cada, distrito tiene su encanto y su propia historia, y la gente hace vida en dichos distritos yo se desplaza a la city a trabajar, algo como lo que pasa en Madrid con los ciudades que la rodean ,aquí si que salvando las distancias.
El próximo capítulo irá sobre Greenwich Village, que es la residencia donde vivo y sobre la cantidad enorme de gente distinta que he encontrado en Australia, sobre el Mardi Gras y sobre mi cumpleaños.
Debo agradecer desde aquí todas las felicitaciones que me han llegado y las que no me han llegado a mi pero han llegado a mi casa, que se que es complicada la comunicación desde tan lejos. Muchas Gracias a todos.