10 abr 2009

Viajes: Cairns (2ªparte)





Hola again!!!
Creo que habíamos dejado la historia en lo indignados que estaba con la decisión de la Cope, pero eso no nos incumbe ahora, porque igual me pongo a hablar de la crisis de gobierno y tengo que fundar otro blog para hablar de los meritos de Don José Blanco para ser ministro. Nos iremos un poco para atrás en la historia, que luego os cuesta seguirla y me decís que la culpa es mía, y se que hay algún lector víctima de la L.O.E. y no tenemos porque discriminarle.
El tema es que después de sacar nuestro examen teórico de buceo con buenísima nota, no hay nada como que te interese el tema para sacar buena calificación, el señor instructor de la parte teórica, Dave, nos dio unas ligeras pautas de lo que iba a pasar en el barco los próximos tres días, lo que debíamos llevar, lo que no, y fue curioso que en lo que más énfasis puso fue en que compráramos las míticas pastillas para el mareo, porque se esperaban olas de 3 metros y fuerte viento en el trayecto hasta la gran barrera de coral.
Terminada la charla, pasamos por la tienda de Pro Dive y el que quiso compro cositas, como mascara,snorkel,aletas (fins para los angloparlantes). Inmediatamente después, la parada obligada era la farmacia para comprar cargamento de biodraminas, luego un poquillo de turismo y shopping en Cairns y de vuelta a Calypso Inn nuestro querido backpackers, tengo que hacer una mención especial de los hostels australianos, muchísimo mejores y más baratos que cualquiera en Europa y por supuesto en España, por supuesto el que quiera rebatirme esto tendrá que hacerme una visitilla.
Y llego el momento, jueves 19 de Marzo de 2009, 5:30 de la mañana, Dave y su furgoneta se plantan delante del backpackers para recogernos a Dag, Javi, Stine y a mi con destino a la Gran Barrera de Coral.
Despúes de alguna que otra paradita, para recoger a más gente del curso, Lena de Alemania, Rainy y Mike de Canada, Roi de Israel, y otro cuanto más, llegamos al Scubapro I, el barco que sería nuestra casa las próximas 72 horas. Una vez en el barco, nos separaron en habitaciones de dos, nos dieron una charlita o briefing de seguridad, y todo el mundo a aguantar como pudo la maraca en la que se convirtió el bonito barco. Yo no me suelo marear, de hecho no me maree pero fue porque me fui a dormir y porque iba mas puesto de pastillas antimareo que Antonio Vega en sus buenos tiempos (está va por ti Blanca, que me da que ni lo lees), pero hubo gente que lo pasó realmente mal, la pobre Stine que iba sólo para hacer Snorkel(para los torpes, es lo que se hace sólo con el tubito y la mascara) porque no paso el curso por su ataque de pánico recordará el viaje toda su vida.
Después de 3 horitas de balanceo, llegamos al primer arrecife en el que íbamos a hacer la primera inmersión, en cuanto el barco estuvo amarrado a los puntos de amarre, valga la redundancia, acabaron las carreras al baño para vomitar y los golpes contra muebles y objetos varios.
Para las inmersiones estábamos separados por grupos, y aunque Dave nos daba toda la parte teórica, para la parte práctica en piscina y en la Gran Barrera nuestro monitor era Ben, un alemán muy simpático, y el equipo lo formábamos Javi, Dag, dos chicas danesas, Louise y Ree, y un servidor, por lo que inmediatamente nuestro grupo paso a denominarse Spanish Vikings.
Todo el mundo preparó su material, traje, tanque, BCD (que es chaleco, que hinchas o deshinchas), fins, pesas, mascara… hizo el body chek a su respectivo buddy, para los no iniciados se bucea por parejas más que nada por si pasa algo y te quedas sin aire. El buddy es tu compañero, al que chequeas todo antes de entrar en el agua.
En la superficie la primera impresión era un poquillo desagradable, porque había bastante viento y las olas eran bastante grandes, pero una vez por debajo de la superficie la sensación es maravillosa, 29º de temperatura en el agua, y el paisaje más increíble que se pueda imaginar. Es como si el mundo se parara y todo lo que hay por encima de la superficie desapareciera de tu cabeza y solo pensaras en lo que te rodea.
La primera inmersión de mi vida fue hasta unos 16 metros, aunque de la profundidad no eres consciente hasta que vuelves al barco miras el ordenador para ver la profundidad máxima a las que has estado y el tiempo que has estado, para rellenar la hoja de registro de inmersiones. Las primeras inmersiones fueron para terminar el curso, y hacer en el fondo los mismos ejercicios que hacíamos en la piscina, como quitarte la mascara volverla a poner y sacar el agua, o cambiar de regulador con tu buddy.
Si bucear en la piscina cansaba, os podéis imaginar como terminas después de estar buceando todo el día. Cuando no estábamos buceando estábamos comiendo, la verdad es que la organización del viaje fue muy buena y no tenemos ninguna queja al respecto.
Completamos nuestras inmersiones pertenecientes al curso y alguna que otra clase teórica más, como aprender a usar la brújula debajo del agua y otras cosillas y por fin el segundo día tuvimos nuestra primera inmersión no guiada por el monitor, cada uno por su cuenta con su buddy. Antes de las inmersiones libres hay una ligera charla para explicarnos como es el arrecife y los rumbos que tenemos que tomar para ver cada cosilla, le verdad es que era increíble el conocimiento que tenían los instructores del arrecife.
No se nos dio nada mal la primera inmersión en solitario, éramos 4, Dag y Roi el israelí ,y Javi y yo, la verdad es que ni nos perdimos, fue todo perfectamente, sacamos un montón de fotos y vimos muchísimos bichos, os diría lo que son pero es que no me acuerdo de los nombres, que vais a esperar de alguien que llama “pajitas” a las acículas de los pinos (esta va por Bruno), como resumen os diré que estaban Nemo y todos sus colegas.
Pero no todo eran inmersiones normales, quedaba lo más interesante para el final, el segundo día, tras un largo de día de inmersiones y tras la cena, la gente se junto en la popa del barco para ver como el señor conductor del barco, capitán, comandante, o lo que sea, se dedicaba alimentar a los peces echándoles una especie de sardinas, por lo que un montón de peces acudieron a la cita, pero lo mejor de todo estaba por llegar, con la gran cantidad de “pescados” que se arremolinaban junto al barco, rápidamente aparecieron dos tiburones del arrecife, que tendría como metro y medio de largo y que inmediatamente impusieron su ley quedándose con todo lo que caía del barco.
Justo cuando todo el mundo disfrutaba del espectáculo, las sardinas se terminaron y el señor capitán se dio la vuelta para decir estamos listos para la inmersión nocturna, con la consiguiente cara de canguelo de la mayoría de los presentes. Tras enseñarnos las precauciones que hay que tomar en una inmersión de ese tipo, acojonarnos un poquillo con las típicas historias para no dormir y ponernos la banda sonora de Tiburón durante las explicaciones, todo el mundo al agua para nuestra primera inmersión nocturna.
La verdad es que impresiona un poquillo, porque sólo se ve donde tu apuntas con la linterna que te dan, pero es increíble hay más vida nocturna ahí abajo que en España, muchos de los “bichos” que por él día andan por allí por la noche desaparecen pero aquí hay bichos para aburrir así ves tantos o más que de día. El final de la inmersión nocturna fue lo mejor de todo, porque al volver al barco los tiburones que vinieron a visitarnos después de la cena, seguían por allí y es bastante impresionante ver los dos ojos azules acercarse, y aunque al principio da un poco de canguelo luego te das cuenta de que probablemente ellos tienen más miedo de la máquina metálica de hacer burbujas que es un buceador.
Y voy a ir aligerando que esto se está haciendo larguísimo y tengo que contar el viaje a Melbourne. Para el último día nos quedaba la inmersión más profunda, cerca de 30 metros, y la sensación es increíble, puede que fuera la “nitrogen narcosis” que es algo así como que el nitrógeno a una determinada presión es tóxico. No te mata, pero las cosas que puede provocar si que pueden matarte, y es que el efecto es el mismo que estar borracho, por lo que a esa profundidad repites un sencillo test que has hecho antes en el barco y si el tiempo que tardas en hacerlo a 30 metro es mucho mayor que en la superficie entonces es que estás colocado de nitrógeno.
El test consiste en una tablilla con números del uno al 20 desordenados y tienes que tocar los número en orden y después de cada número tocarte la nariz, parece una tontería pero las cosas que cuentan de gente afectada por intoxicación por nitrógeno son tan divertidas como peligrosas.
Como voy por la tercera página de esta entrada y me da a mi que esto se alarga demasiado y empieza a parecerse a una telenovela barata, dejaremos el final de este viaje para enlazarlo con el principio del siguiente , de acuerdo? Prometo no demorarme mucho en la siguiente publicación. Un saludo desde Sydney

7 abr 2009

Viajes: Cairns (1ªparte)



Hola que tal
Otra vez va a hacer casi un mes desde la última vez que escribí, pero esta vez tengo una buena excusa, y es que hace unas 3 semanas comenzaban mis vacaciones por lo que no he tenido mucho tiempo para actualizar el blog
En la primera parte de dichas vacaciones decidimos irnos a Cairns, en el estado de Queensland, situada justo en frente de la Gran Barrera de Coral. La expedición la formábamos una Alemana Theresa, una Noruega Stine, un Noruego Dag, otro Español, Javi y yo.
El lunes 16 de Marzo, nos trasladábamos por grupos, ya que cada uno tenía clase a una hora distinta, hasta el aeropuerto doméstico de Sydney donde tomamos un avión de Virgin Blue con destino a Cairns, del viaje podemos sacar dos conclusiones claras, una que las compañías aéreas Australianas de bajo coste funcionan muchísimo mejor que las Europeas, y la segunda que las distancias aquí nada tienen que ver con Europa, el viaje duró 2 horas y media casi tres, con ese tiempo desde España te plantas en Oslo sin ningún problema.
Nada más bajar del avión notas que estás realmente lejos de Sydney, el paisaje que te rodea es completamente distinto, el famoso rainforest lo rodea todo, y el tortazo de calor que te llevas te dice que has subido unos cuantos miles de kilómetros hacia el norte, estás casi en el trópico y eso se nota.
Una vez fuera del aeropuerto, descubres que Cairns no es nada del otro mundo, una ciudad nueva, las calles son todas perfectamente perpendiculares y paralelas a la línea de costa, turística y completamente enfocada a la Gran Barrera de Coral.
Llegamos al backpackers, tras un apacible paseo en minibus, donde nos esperaba Theresa que llevaba en Cairns desde el día anterior haciendo un minisafari por el rainforest, y gracias a que ella conocimos un montón de detalles, descubrimos que los cocodrilos tienen una habilidad especial para atacar al más débil de entre todas sus posibles víctimas, descubrimos que si te caes del barco del safari ya puedes tener en regla los papeles de repatriación de cadáveres a España, porque no hay posibilidad de que te salves.
Descubrimos también que nadie se baña en la playa, alguno podrá pensar que es porque el agua está fría, pero no!! el agua está a 30ª , el bonito motivo por el que nadie se baña es que hay una medusa que si te toca mueres a los 5 minutos, por lo que los carteles de prohibido el baño están más que justificados, para compensar que no disponen de playa Cairns tiene una pedazo de piscina pública que hace las veces de mar,
Esto hace que pierda un poco de encanto como destino turístico, tal y como lo conocemos en España, ya que en lugar de sombrillas, lo que hay en la playa son unos botes bastante considerables de vinagre, y tu la primera vez pues dices –que gracioso, esto del vinagre- pero cuando te dicen que te puede salvar la vida porque , empiezas a ver las ensaladas de otra manera. Después de aprender 5 o 6 nuevas formas de morir mientras llegaba Dag que fue el último en aterrizar, decidimos irnos a dormir para afrontar el duro día que nos esperaba.
A las 7 de la mañana, una furgoneta pasaba a recogernos por el backpackers y nos llevaba al centro de Cairns para empezar nuestro curso de buceo con Pro Dive. El centro de buceo que Pro Dive tiene en Cairns es un centro 5 estrellas y está inscrito dentro del PADI (Professional Association of Diving Instructors). Nada más llegar 3 horitas de curso teórico que no está nada mal para mejorar Inglés hacer un curso de estos en la lengua de Shakespeare, aunque tiene el riesgo que si voy a bucear alguna vez en España, que espero que si, alguna cosa sólo la se en Ingles. Tras el curso teórico reconocimiento médico para ver si estábamos en condiciones para bucear, y ahí recibimos la mala noticia que Theresa no podía porque de pequeña tuvo asma y no es muy compatible con lo del buceo, así que le devolvieron el dinero y tuvo que buscarse otras cosas para hacer durante la semana.
Por la tarde y después de comer, a la piscina a poner en práctica no aprendido en el curso teórico, la verdad es que en cuanto te acostumbras a respirar por la boca con el “regulador” lo demás esta tirado. Tras 4 horas metidos en el agua, que parecíamos uvas pasas, la misma furgoneta nos devolvió al backpackers, hechos polvo, porque parece que no pero el temita del buceo cansa de lo lindo.
El día siguiente fue igual que el primero pero a la inversa, por la mañana piscina pero en la zona de 4 metros y por la tardo no se cuantas horas de teoría y examen. Durante la parte de piscina perdimos a Stine para la práctica del buceo, porque en uno de los ejercicios en el fondo, le entro el agobio o el pánico como lo queráis llamar y subió a la superficie muy rápido y el instructor le dijo que en si hacía eso en medio del mar podía ser muy peligroso, así que se agobio y una menos, por lo que sólo quedábamos los chicos , el vikingo y los dos españoles con el resto de la gente del curso.
Tras el examen, que todos pasamos con nota, un poco de turismo por Cairns y a dormir que al día siguiente empezaba el verdadero curso, con el viaje en barco a la Gran Barrera durante 3 días, pero eso lo dejamos para el próximo episodio que si os lo cuento todo ahora perdéis el interés me baja la audiencia en el próximo EGM y me quitan el programa como a Federico (pero que indignado estoy).

P.D. en las fotos podéis ver la piscina que sustituye a la playa en Cairns y el centro de buceo de Pro Dive